Los garajes en las ciudades han llegado a ser un aspecto imprescindible en los edificios de nueva construcción debido en gran parte a la creciente cantidad de vehículos que pueblan las ciudades. Todos los edificios modernos tienen en sus planes de edificación alguna planta de garaje, principalmente en los sótanos de los edificios.
Pensando en la seguridad de esos lugares que suelen estar llenos de vigas sobre las que se sostiene el edificio que hay encima, se colocan topes de estacionamiento que obligan a reducir la velocidad cuando se circula dentro de ellos, con el propósito de facilitar en caso de emergencia la reacción del conductor que busca aparcamiento.
Otros elementos de seguridad que se proyectan en los garajes y edificios de aparcamientos es disponer de una correcta iluminación, tanto para poder ver convenientemente las rayas que delimitan las plazas como para poder tener una buena visibilidad, ya que habitualmente estos lugares suelen ser muy oscuros debido a los lugares en los que están construidos y al aprovechamiento de los huecos.